Nuestro pan cotidiano, dánoslo hoy
Inmersos en la tardía sociedad feudal y campesina del mil setecientos, en la que los propietarios de las tierras no tenían intención alguna de trabajarlas, sino de vivir de ellas a través del trabajo de otros, cuando la Iglesia tampoco estaba dispuesta a perder sus privilegios y mientras la Corona estaba gobernada por una dinastía recién estrenada en España, la de los Borbones, cuya política fue concentrar en manos del monarca las decisiones fundamentales de una serie de reformas en las que todo el mundo tenía que contribuir en la justa medida de sus capacidades, los habitantes de Campofrío, una población de apenas mil quinientas personas, logran construir, gracias a su trabajo y lucha, toda una serie de objetivos patrimoniales que dejaron en herencia al pueblo.
Con motivo del 225 aniversario de la construcción de la iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, esta novela corta, inspirada en hechos reales, es un homenaje a todos esos buscadores continuos de valores a los que asirse, sabedores de que la época que les había tocado vivir era difícil y temerosos de la que estaba por venir: «A los que moraron y regaron esta bendita tierra con su sudor».
Algunos lo lograron
El autor refleja en este libro lo ocurrido en la Cuenca Minera de Riotinto en el transcurso de la Guerra Civil Española y la tragedia que se conocería como «la columna de los ocho mil», que tiñó de sangre Llerena y los pueblos cercanos. Todos los protagonistas poseen idéntico valor para él, todos entran por igual, convencido como está de que cada cual interpretó el papel que le asignaron, en una representación en la que directores y realizadores de ambos bandos cometieron multitud de errores.
Las consecuencias de un trágico accidente de camión ocurrido en la tarde del 30 de mayo de 1956 lo envuelve todo. Aquel debería haber sido un día especial: se casaba Felipe.
Melétios
Año del Señor de 1710. Francisco Camacho emprendió un plan. Tan absurdo que, para que funcionase, era fundamental que le creyesen. Resucitó para ello a Melétios, obispo griego. Una pequeña mueca como muestra de dolor fue su única queja ante el corte del labio superior. Había que hacerlo porque era una de las señas de identidad. El remordimiento que sintió cuando le tonsuraron hizo que pensase que el pecado había mordido con toda su fuerza su carne débil.
Sus padres le habían criado en la educación católica y él se muestra convencido de que el amor puede más que la muerte. Ese amor, Dante lo dijo, motor del universo: l´amor che move il sole e l´altre stelle. Haber nacido pobre hubiese sido el factor que condenase al olvido tan memorables hazañas si no hubiese batallado para que esto no ocurriese. El autor afirma al término de la obra: «Mi lucha ha sido prestarle ayuda, pues si entre los pobres no nos apoyamos, nos caemos».
Luz entre rejas
En el número 14 de la rúa de Veeduría se oyen voces y el ruido que produce un cuerpo al caer. Se descubre más tarde que la anciana vecina, adinerada, ha sido asesinada de forma brutal.
A doña Concepción Arenal, escritora, penalista y socióloga, su sexto sentido le dice que la sentencia se dictó de forma precipitada e injusta, en una época en que a las presas les estaba reservado el peor de los papeles por una sociedad cuyas leyes las escribían y las dictaban los hombres. Y, haciendo también uso de doña Juana María de la Vega, coruñesa liberal volcada en ayudar a los más desfavorecidos, el autor logra transmitir que el camino de España para sacudirse esa culpa y esa gran vergüenza pasa por educar a la mujer.
Sororidad anhelada
1880. La semilla intelectual y moral de doña Concepción Arenal florece en la persona de Clara Agostinho, discípula suya como vimos en la primera parte de esta dilogía. Escuchando los dictados de su propio corazón y aplicando los principios de su maestra, buscó equidad y solidaridad educativa para los lugares más remotos del país.
Seducida por la manera de escribir y pintar de dos mujeres, deseosa la una de poder tocar el cielo con las manos y poseedora la otra de alas para volar, se decide a difundir sus trabajos, por considerar que contienen la fuerza de liberar cosas que muchas mujeres mantienen encerradas dentro de ellas. Y juntas luchan por un doble objetivo: erradicar el absentismo escolar, sobre todo el femenino, y poner fin a la desigualdad de género.
El autor deja, como tarea del lector, averiguar dónde empieza la ficción y dónde la verdadera historia.